ADMIRACIÓN

Es un factor potenciador de la relación, prácticamente es como se inicia la conexión entre dos personas, cuando nos estamos enamorando, pensamos en todas las razones por las que queremos estar con esa persona, reconocemos todas sus cualidades y las repetimos emocionados constantemente en nuestra mente. Entre todas estas razones encontramos muchas de admiración.

Poco a poco conocemos otras características de la persona y seguramente muchas de ellas no serán de nuestro mayor agrado (esto es completamente normal), es más, en el transcurso de la relación te puedes dar cuenta que eso que admirabas no era real o ya no está, (esto también es normal) sea cual sea el caso, todo ser humano tiene cualidades a admirar, cosas que a nosotros nos gustaría tener en nuestras vidas, maneras de ver la vida, formas de actuar, capacidades que no ves en otras personas y mucho más. Y si hemos perdido admiración por nuestra pareja, solo hace falta que resolvamos los siguientes ejercicios:

  1. Recuerda todo aquello que admirabas
  2. Analiza si tu pareja sigue actuando así
  3. Evalúa a tu pareja y has un listado de nuevas cosas que admiras en ella.

En cuanto lo tengas identificado y te concentres en ello, podrás ver a tu pareja desde otra perspectiva (con otros ojos)

 

¿Para qué sirve esto?

La admiración favorece una relación, de manera constante contribuye a sumar de constante respeto, motivación y satisfacción, mirar a la persona y sentirse dichoso/a de que te acompañe en tu cotidianidad, va a permitir que des lo mejor de ti en la relación, por el contrario, si no hay admiración, la relación va a estar acompañada de constantes juicios, críticas y frustración.

Amar es admirar con el corazón; admirar es amar con la mente.

Theophile Gautier

EMPATÍA

Tener la capacidad de ponerse en los zapatos del otro les va a evitar un 90% de las discusiones, dado que una relación es de dos, serán dos juicios u opiniones diferentes las que siempre van a estar sobre la mesa, la manera en que se asumen esas situaciones podrá evitar o promover dichas discusiones.

Si nos situamos en una relación siendo solo “individuos” y no pareja, es porque aún no hemos entendido la esencia de una relación, y tendremos constantemente choques innecesarios, en lugar de ello si buscamos comprender quién es el otro, de donde viene su forma de pensar, de actuar, de comprender sus experiencias podremos entender el mundo del otro y acercarnos a él. Recuerda que la empatía acerca a las personas y el individualismo o egocentrismo nos aleja.

Pregúntate…

¿Cuántas veces has tenido discusiones innecesarias con tu pareja?

¿Cuántas veces se ha hecho sentir al otro poco escuchado o atendido?

¿En qué ocasiones no has considerado lo que el otro está pensado?

 

La empatía no significa sumisión o permitir que el otro pase por encima de tus necesidades o ideas, la empatía debe ir en doble dirección

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